miércoles, 11 de agosto de 2010

Paseo por el río

Me transportan mis pies a la vera de un río,
mi mente en blanco y mis ojos ocupados
en encontrar una piedrecita de colores
que luzca algo especial que amerite conservarla.

Muchas a simple vista llaman mi atención,
al acercarme y examinarlas bien,
se revelan comunes...
no tienen nada diferente...

...

Encontré una que es distinta,
colores vivos y únicos,
pequeños cristales incrustados
adornan su superficie con brillitos.

Se iluminan mis ojos al verla...

...

La piedrita se secó en mi bolsillo,
sigue siendo diferente,
mas ahora veo su verdadero colorido...

Las tonalidades ya no son tan fuertes
y los cristales no eran tantos
como los apreciados en un comienzo...

Tiene fallas, tiene imperfecciones,
tiene otros múltiples colores.
A veces brilla,
otras veces
su oscuridad me encandila...

¿Será una buena idea conservarla?

El abrazo final

Cuando el sol se ponga En el largo día de mi vida La Madre Tierra me recibirá  Con brazos abiertos en su seno Libraré al mundo de mi maldad ...